Campeona mundial al servicio de los niños más vulnerables

COLORADO SPRINGS. Jang Mi-ran, conocida como la mujer más fuerte del mundo, unió fuerzas con el niñito de ocho años Fellow Blewussi Kpodo mediante el patrocinio del programa one-on-one child. Un programa que ofrece la organización “Compassion” que ayuda a liberar a los niños de la pobreza, mientras se fomenta una fuerte relación entre el niño y el patrocinador.

Según un comunicado de prensa, Mi-ran, es una antigua colaboradora del programa “Compasión Internacional”, que ostenta el título de “la mujer más fuerte del mundo” después de ganar la medalla de oro el año pasado en el levantamiento de pesas para los Juegos Olímpicos de Beijing, en la división de peso pesado.

Fellow es uno de cuatro niños que viven con su padre en Kelegougan aldea, a diez kilómetros al noreste de la capital de Togo en la ciudad de Lomé.

“Compasión Internacional” explicó que la vida ha sido difícil para el becario y su familia en la pequeña nación de África occidental de Togo, un país cuya población se ha visto gravemente afectada por los estragos del SIDA.

Sin embargo, la lucha se intensificó cuando la madre del becario murió, mientras corrió a salvar a una de sus hermanas mayores de un carro que se acercaba. Tras esta trágica pérdida, el padre del becario continúa dedicado a trabajar como conductor para mantener a la familia de cinco.

Esta singular historia de la bondad y la buena voluntad, sin embargo, no comienzan y terminan con un campeón mundial que decide patrocinar a un niñito de África occidental.

Según Wess Stafford, presidente y CEO de “Compasión Internacional”, este patrocinio es muy especial ya que representa un hito para el ministerio. El programa Compasión tiene 57-años de historia, y más de dos millones de niños han sido atendidos a través de la organización de diversos programas. Sin embargo, esta es la primera vez que un millón de niños han sido patrocinados concurrentemente.

“Compasión Internacional” es la organización cristiana de desarrollo infantil que permanentemente está liberando a los niños de la pobreza. Fundada en 1952, “Compasión” aborda exitosamente la pobreza en el mundo un niño a la vez, sirviendo a más de un millón de niños en 25 de los países más pobres del mundo.

“Compasión” trabaja de forma integral a través de las iglesias locales para hacer frente de manera individual a las necesidades físicas, económicas, educativas y espirituales de los niños a fin de que estos puedan prosperar, no sólo sobrevivir.

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